lunes, 17 de diciembre de 2007

EXIJO SER UN HÉROE

Hola a todos:

Hace mucho tiempo que no escribía en este post, pero debo hacerlo ahora, porque este país necesita saber que en muchos lugares perdidos de nuestra larga y angosta faja de tierra existen personas que se sacan la cresta por conseguir sus sueños; uno de esos es Mauricio Castillo, Chino para sus amigos y hermanos, Chinoy para sus seguidores.

¿Quién es este personaje? Es un muy querido amigo de juventud (y de mi presente) que se sentaba en la Parroquia de San Antonio a tocar guitarra cuando tenía 10 años, al lado de unos lolillos de 19 y más, que le gustaba jugar a la pelota con los más viejos, hincha de la "U", y con una tremenda voz, particular y única. El paso de los años algo nos alejó, pero siempre existía el momento para encontrarnos y conversar...

Hoy, Chinoy ha de ser el mayor proyecto de la música nacional, y así lo ha ido demostrando en su larga carrera under, exponiendo sus composiciones de folk punk en bares y pubs de San Antonio, Valparaíso y, en el último tiempo, de Santiago.

Su voz sigue siendo única, sus composiciones, desgarradoras; su interpretación, magistral; su música, tremendamente potente. Una sola guitarra llena el espacio de sensaciones; su forma de golpear las cuerdas muestra la rabia de los marginados; me recuerda algo el estilo de Silvio cuando rasguea sus canciones más agresivas; sin embargo Chinoy es único, a nadie le copia, su obra es completamente original, tanto en la interpretación como en la musicalización. Me jacto de saber mucho de música, y con esta jactancia me atrevo a decir que es lo mejor que he escuchado en muchos años. Además, es un actor que interpreta su personaje durante los minutos que duran sus temas, mientras que en los intermedios de cada canción vuelve a ser el niño que yo conocí, el mismo que una tarde de diciembre de 1995 me gritaba en el Estadio Nacional desde un lado de la galería al otro, mientras celebrabamos el "Bi" del Bulla.

El domingo antepasado se presentó en la Sala Tudor, en la punta del Cerro San Cristobal; el jueves 13 de diciembre, llenó la sala SCD de Santa Filomena 110. Los lugares donde muestra sus creaciones se colman de personas que corean sus canciones ( que superan la centena) y su fama crece con cada melodía, casi como un mito ( como leí por ahí) Pueden descubrir su música en ares, poniendo "Chinoy" en la búsqueda, o ingresando a su sitio web myspace.com/chinoysite.

Chinoy es un tremendo músico, el más grande de los últimos tiempos, y no trepido en decirlo, que no estuvo dispuesto a seguir sus días de oscuridad, que se cansó de ser uno más de entre el público, y que estará muy pronto en los estadios y en los rankings de las radios...



jueves, 21 de junio de 2007

GEOCORPOGRAFÍA (NO PERDAÍS TIEMPO EN EL DICCIONARIO)

Tus soles verdes, que empuñaron
liquidantes las dagas asesinas
impávidas al cielo pastoso,
inspiraron el concierto.

Humedecí en mis oleadas
las pálidas arenas de tu piel
que, por la argentina ribera,
crispó mis deseos.

Las montañas sudorosas
jamás nevadas en sus cimas,
conocieron la salinidad
de los que no fueron hijos.

El profundo antro de apetitos,
resucitados por el invasor,
pregonó alegorías y estertores
frente a la abatida indemne.

Los diestros implementos
con que forjabas mi alfarería,
no volverán a socorrer al virtuoso
de tanta obra malgastada.





miércoles, 20 de junio de 2007

ABSOLUCIÓN

Llegarás a la esquina de tu vida arrodillada,
y te miraré lleno de palabras mudas,
pues soy yo y no otro
el responsable de tu decadencia.

El propio orgullo iluminado segará tus pupilas,
y se encenderá la hoguera vana,
derritiendo esa piel lozana
que cobija tus peores miedos.

Lamentos surgirán de tus labios,
tantas veces torturados por el insulto,
y la dulce miel de tus apenados ojos
será sorbida por el cancerbero sediento.

Se secará el manjar de tu entrepierna
mientras mi rabia golpea contra ella.
No habrá piedad en tus infiernos,
no habrá sosiego… serás nada.

Refinaste a la ramera entre mis besos,
y pagaste con maldigo mi esperanza,
desterrada de mi cama… exiliada del recuerdo,
se tragará la tierra tus entrañas.

martes, 19 de junio de 2007

TESTIMONIO

Cuando las luces de la ciudad
fraguan las tristes hendijas callejeras,
una sombra enluta su destello.

Entre caliginosas avenidas intrincadas,
se desdibuja lúgubre
un abatido remedo de humanidad.

Soy el decadente: artífice del estrago,
el que hundiendo el cielo desfallece…
invierno, alma intransigente,
el empobrecido hazmerreír de su sortilegio.

¿Cómo trasuntas la tristeza?
tu sol dando vida a lo finito;
anhelos, ensueños y apetitos
viajan a ti, en tu seno anidan.
Razón, existencia eres:
razón de mi ser, mil veces.
Pasaje inmortal a tu regazo,
mis miedos en ti se desvanecen.
Tú, la canción de amor que no perece,
tú, el sincero aletear de colibríes,
tú, el principio y el fin de la locura…
esa tierna y enamorada locura mía.
Arropa mis fantasmas en tu abrazo,
aunque no pueda tocarte a la distancia.
Lejanía, se acaba de un plumazo,
en tu mirada espejándose en la mía.
Vuelco en testimonio lo que el alma siente,
en versos de estropicios nocturnales
¿serás todo aquello que tú crees?
¿serás futuro? ¿o simplemente ideales?